Lo que buscamos es que la gente embarcada lo haga en plenitud, con toda la dignidad y condiciones de bienestar”, señaló el parlamentario, quien presentó la iniciativa el año 2015 en la Cámara de Diputados.
Valparaiso.- Esta semana terminó su tramitación en el Congreso, el proyecto que redefine las condiciones de habitabilidad de las embarcaciones pesqueras artesanales y las que prestan apoyo a la acuicultura, el cual fue presentado el año 2015, por el entonces diputado David Sandoval, junto a un grupo transversal de parlamentarios.
La iniciativa, recordó el actual senador por Aysén, que el proyecto nace a consecuencia de las inquietudes planteadas por distintos armadores locales, entre ellos, Roberto Schulteiss, de Puerto Aysén, ante la preocupación existente por las condiciones en que desarrollaban sus labores. “La ley de pesca no contemplaba el reconocimiento de aquellas naves que no solo están pescando, sino que prestan servicios a la acuicultura, a través de mantención de redes, provisión de alimentos, insumos, en fin, tantas cosas que tiene la actividad. Y don Roberto Schulteiss, nos manifestó esta inquietud. Esta norma, después de cinco años, acaba de salir aprobada por la Cámara de Diputados en su último trámite”, señaló.
En ese sentido, el legislador destacó que con esto se busca asegurar mejoras sustanciales en el desarrollo de las actividades de los trabajadores del mar, tanto en la habitabilidad como en los espacios donde conviven, lo que adquiere más relevancia en el actual contexto de pandemia de Covid-19, contribuyendo así a reducir los riesgos de contagio y disminuyendo el hacinamiento al que muchas veces se ven expuestos. “Lo que buscamos es que la gente embarcada, que presta estos servicios, lo haga en plenitud con toda la dignidad y condiciones de bienestar, más aún en una condición de pandemia donde se requiere extremar estos esfuerzos”, subrayó.
Cabe señalar que en un plazo de seis meses aproximadamente, desde publicada la ley, deberá dictarse un reglamento que hará operativa esta norma, el cual determinará, en detalle, las condiciones de habitabilidad y bienestar que deben cumplir las naves, debiendo siempre tener en cuenta la zona geográfica en que éstas operan. “Es una gran iniciativa y una gran noticia para todos los armadores, para los sindicatos de trabajadores que habían planteado esta necesidad hace mucho tiempo.