En la región de Magallanes es muy conocida la estrecha y antigua relación entre dos empresas muy simbólicas de nuestra zona: ENAP y DAP. De hecho por muchos años DAP fue la empresa que le prestaba servicios de helicópteros a la empresa estatal.
Sin embargo, en Argentina la relación no ha sido tan buena, pues el mismo servicio de helicópteros se lo prestaba la filial de DAP en Argentina a ENAP SIPETROL, filial de la estatal chilena, pero la relación terminó incluso con querella, porque ENAP sostiene que uno de sus ejecutivos era sobornado por la aeronáutica privada.
ENAP SIPETROL es una filial controlada en un 100% por su matriz chilena ENAP y que DAP es también una filial de su matriz chilena, controlada de manera equivalente.
¿Qué paso?
ENAP SIPETROL presentó una querella en los tribunales argentinos por el delito de “Defraudación administrativa fraudulenta”, en contra de su exempleado F.A.F. (todos los antecedentes están en documentos de acceso público en los tribunales argentinos, pero como no hay condena preferimos identificar a los involucrados solo por sus iniciales) y en contra de todos “los responsables de la empresa D.A.P. Argentina Helicópteros S.A.
En su presentación a tribunales ENAP sostiene que en una auditoría interna realizada su filial ENAP SIPETROL, descubrieron que su ejecutivo F.A.F. tenía una sociedad personal no declarada, de nombre “Servicios y Logística Integral S.A.”, la cual tenía relaciones comerciales con DAP HELICÓPTEROS ARGENTINA S.A.
Lo más grave del caso es que era precisamente F.A.F. quien negociaba con DAP representando a ENAP SIPETROL. La presentación de ENAP no deja lugar a dudas, refiriéndose a F.A.F. dice textualmente lo siguiente: “era el encargado por parte de SIPETROL de negociar y controlar la ejecución de un contrato millonario entre DAP y su empleador, y quien aprobaba las horas de vuelo facturadas, el transporte de personas y mercaderías a las plataformas marítimas”.
Esto es lo que denuncia y afirma ENAP. Por alguna razón la compañía no aportó las pruebas y la investigación no terminó en condena, pero ENAP tampoco se desistió y, hasta donde se sabe, no hay una sentencia absolutoria.
Dado lo anterior, ¿Por qué ENAP sigue teniendo relaciones comerciales con DAP en Chile e incluso esta empresa sigue participando en licitaciones de la estatal? Esa es la duda instalada que aún no tiene respuesta.
A diferencia del resto de Chile, en Magallanes la frontera es solo una línea imaginaria y muchas empresas que trabajan o prestan servicios en ambos lados constituyen filiales en Argentina, pero son las mismas empresas prestando el mismo servicio a unos pocos kilómetros de distancia.
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