En una jornada especial, más de 15 niños, con edades comprendidas entre los 8 y 12 años, protagonizaron un hermoso momento al celebrar su primera comunión en la Catedral de Punta Arenas.
El compromiso de los jóvenes con la fe quedó patente al pronunciar un simbólico “Sí, renuncio”, prometiendo apartarse de todo aquello que los aleje de la enseñanza divina.
Acompañados por sus familias, los niños recibieron palabras de aliento por parte del padre Fredy Subiabre, culminando la ceremonia con un unísono “amén” y gestos de cariño por parte de los presentes.
Esta significativa preparación de un año concluyó con la celebración del sacramento de la eucaristía, marcando el inicio de un compromiso comunitario para los pequeños. El padre Subiabre destacó la importancia de que tanto los niños como sus familias se integren activamente a la comunidad, fomentando el amor a Jesús a través de acciones concretas y el servicio a los demás.
La emotiva ceremonia finalizó poco antes del mediodía, dejando en los corazones de todos un recuerdo inolvidable de fe y compromiso.