En respuesta a la emergencia provocada por el rebalse de la captación de agua en Puerto Williams, las autoridades locales se han reunido para analizar los avances y coordinar soluciones efectivas. Tras tres días de la emergencia, el mando técnico del Comité de Gestión del Riesgo de Desastres de la Provincia Antártica Chilena se congregó en la zona afectada para evaluar las labores en curso y determinar el estado de la bocatoma, cuyo desbordamiento ha dejado a la población sin suministro de agua potable en la región austral.
Durante la reunión en las instalaciones municipales, ubicadas en la base del cerro La Bandera, las autoridades y representantes de la empresa proveedora examinaron de cerca las acciones realizadas, incluyendo el aislamiento de la zona afectada para facilitar el desagüe de la infraestructura y evaluar su condición precisa. Funcionarios municipales, personal de la Armada de Chile y de Aguas Magallanes han estado colaborando activamente en la zona para lograr estos objetivos cruciales.
La delegada presidencial provincial de la Antártica Chilena, María Luisa Muñoz, resaltó los esfuerzos desplegados y comunicó que la empresa se encuentra en proceso de desaguar el área de la captación con el fin de permitir su limpieza y reparación. Asimismo, anunció el envío de más de 200 mil litros de agua potable desde Punta Arenas a través de buques navales y el ferry Yaghan, bajo las directrices del Cogrid Regional previamente activado.
Se anticipa la llegada de los buques de la Armada, el “Elicura” y el “Sibbald”, en los próximos días con capacidad para transportar 70 mil y 32 mil litros de agua respectivamente, mientras que el ferry Yaghan llevará otros 100 mil litros. El alcalde de la comuna de Cabo de Hornos, Patricio Fernández, informó sobre la distribución de agua potable en puntos estratégicos de la ciudad y la preparación de piscinas para uso sanitario, en un esfuerzo conjunto por mitigar los impactos de esta situación crítica.