Una reciente fiscalización de Bienes Nacionales en más de 150 hectáreas entre los ríos San Juan y Santa María, al sur de Punta Arenas, reveló un preocupante nivel de daño ambiental.
La inspección de una docena de inmuebles fiscales evidenció la presencia de residuos y fogatas ilegales, poniendo en riesgo la rica biodiversidad del sector. El área incluye el Área de Protección del Canquén Colorado (27 hectáreas) y territorios de comunidades Kawésqar y Yagán (24 hectáreas).
El Secretario Regional de Bienes Nacionales, Sergio Reyes, manifestó su preocupación por estos hallazgos, recordando el devastador incendio de 2016 que afectó 22 hectáreas y enfatizó la importancia de la responsabilidad ciudadana para proteger este ecosistema, crucial para el futuro Parque Nacional Cabo Froward. Se anunciarán medidas para corregir las irregularidades detectadas.
