La Confederación Nacional de Funcionarios y Funcionarias de la Salud Municipal (Confusam) llevó a cabo un paro de actividades los días 17 y 18 de abril, en demanda de mejores condiciones laborales, seguridad en los centros de salud y el incentivo al retiro. La movilización culminó con una marcha bajo la lluvia que congregó a unas sesenta personas en Punta Arenas, replicándose en distintas ciudades del país.
La presidenta de la Confusam, Gabriela Flores, destacó la alta adhesión de sus socios, alcanzando un 92% de participación en la paralización. Durante la movilización, se aseguró la atención de salud a través de turnos éticos, priorizando casos de urgencia.
Los dirigentes de la Confusam han denunciado que 42 trabajadores fallecieron sin poder acceder al incentivo al retiro, generando malestar entre los trabajadores de la salud. Gabriela Flores expresó su preocupación por la burocracia que retrasa los beneficios destinados a la primera línea de salud.
Por su parte, la presidenta regional de la Confusam, Patricia Pérez, resaltó los obstáculos con el Ministerio de Hacienda para la entrega de fondos, indicando que la demora en la transferencia de recursos afecta directamente a los trabajadores de la salud, siendo una responsabilidad exclusiva de los ministerios de Salud y Hacienda.